Cuando un año está próximo a su finalización, es bueno tomarse un tiempo para reflexionar acerca de los objetivos que nos marcamos al comienzo de ejercicio y la consecución de los mismos. Si este año hemos iniciado una nueva actividad empresarial, proyecto laboral o educativo vale la pena hacer un repaso de nuestro plan de empresa o estratégico para ver cuánto nos hemos desviado de las previsiones, si las mismas siguen vigentes un año después y las medidas que vamos a adoptar para conseguir los objetivos que, obviamente, hemos de reformular este nuevo año.
Todo ello nos va a servir para seguir controlando los procesos en los que estamos inmersos. Es conveniente recordar que la formación continua, la innovación, la comunicacion... son factores importantes a tener en cuenta para cualquier empresa por pequeña que sea y que la flexibilidad será siempre un gran aliado si queremos sobrevivir en tiempos algo más que difíciles.
Felices fiestas y un año 2013 lleno de esperanza y prosperidad.