En primer lugar hemos de
desterrar el concepto de innovación ligado a un producto o servicio altamente
tecnológico y revolucionario, si creyéramos que ese es el único concepto, la
mayoría de las empresas no se plantearían incluir el concepto de innovación en
su día a día.
¿Qué es innovar?
“Innovación es generar o encontrar ideas,
seleccionarlas, implementarlas y comercializarlas”
Podemos decir que hay dos tipos
de innovación, por un lado la que tiene como consecuencia la mejora o creación
de un producto/servicio y por otro lado aquella que mejora o crea una forma de
organizar, de comercializar, de comunicar...
¿Qué factores son necesarios para
que una empresa esté preparada para innovar?
1. Que
la innovación sea un valor que la gerencia o dirección de una empresa se crea.
Así toda la organización se verá impregnada.
2. Que
la innovación sea una parte importante de la mentalidad básica de negocios de
la empresa.
3. Ser
proporcional, se ha de tener en cuenta el tipo de negocio y tamaño de la
empresa, más no siempre es mejor.
4. Se
deben equilibrar los talentos y esfuerzos creativos e implementadores. Un
exceso de creatividad sin la habilidad para darle forma no dejará de ser algo
inútil.
5. Gestionar
los elementos opositores a la innovación. Hay que tener claro qué elementos
humanos pueden ejercer pésima influencia en los elementos que tienen como
objetivo la innovación.
6. Buscar
los recursos internos y externos ¿o acaso lo sabemos todo?
7. La
importancia de la recompensa a la hora de premiar las ideas o iniciativas
internas.
La organización ambidiestra (Thusmann y O’Reilly, 1997)
Sin entrar en detalles, diremos
que una empresa no solo debe EXPLOTAR (fabricar, gestionar, vender, cobrar,
comunicar...) también debe EXPLORAR (revisar, crear, experimentar...) Una
empresa debe ser consciente que aunque el día a día nos imponga explotar, hemos
de dedicar recursos (tiempo, dinero y fe) en la exploración como vía para
asegurar su pervivencia más allá del corto plazo.
Sistematizar la innovación
Es imprescindible que la
innovación no se deje a merced de ideas, sueños, intuiciones y que dependiendo
de la persona y el momento se tomen o no en serio.
¿Cómo sistematizamos la innovación?
Toda la empresa debe tener
conocimiento de que la innovación es un valor que siempre se ha de tener
presente. Es conveniente “reclutar” para el Dpto. de innovación a aquellas
personas más motivadas independientemente de su jerarquía dentro de la empresa.
¿Cómo se recogen las ideas o señales? Cada empresa empleará
el método más ágil y cómodo: tablón de anuncios, email, buzón de sugerencias...
y podrá sugerir cualquier persona de la organización independientemente de su
jerarquía o función dentro de la empresa. Cada idea se acepta sin juzgarla y se
pasa a la siguiente fase: la
amplificación de señales, es decir, buscar más información sobre la idea
original (qué tecnología se necesitaría, proveedores, procedimientos, costes,
colaboradores necesarios...) una vez
recogida esta información pasamos al realizar el proyecto exploratorio, es decir, un documento que recoja toda la información
recopilada y que no permitirá visualizar los aspectos clave de una posible
unidad de negocio (producto, tipo de cliente, competencia...) tras esto, le
introducimos la creatividad o dicho
de otro modo ¿Y ahora, qué más puedo hacer para mejorar el producto/servicio?
Realizar el business plan es el
siguiente paso (recomendamos utilizar el modelo canvas por su estructuración y
sencillez) analizaremos aquí todas las variables y sí llegamos a la conclusión
de que es viable lo ponemos en marcha
sabiendo que como producto o servicio innovador no va a dar los frutos que
puede dar un producto/servicio más maduro, que el mercado conoce más, que están
más claras sus características... así que tendremos paciencia y tolerancia con
su comportamiento. Por supuesto que hemos de establecer unos mecanismos de
control para evaluar los rendimientos económicos, la satisfacción generada en
nuestros clientes, los gastos y el ROI producidos...
A modo de conclusión diremos que:
1. La
innovación no es, solo, una solución tecnológica
2. Debe
ser un valor que emane de la dirección e impregne toda la organización
3. La
organización debe motivar e incentivar a todo el personal (las ideas surgen de
las personas)
4. Los
filtros y etapas nos proporcionan información para conocer la posibilidad de
viabilidad de una innovación.
5. Habilidades
personales como la creatividad, la flexibilidad, el trabajo en equipo... serán
fundamentales para llevar a buen puerto cualquier proyecto de innovación
¿Quieres saber más?
Técnicas de creatividad para la
innovación: http://www.neuronilla.com/desarrolla-tu-creatividad/tecnicas-de-creatividad
[i] Notas
personales y reflexiones tras realizar el curso “La sistematización de la
innovación para la mejora de la competitividad” realizado en Florida Centre de
Formació y con Enrique García Peña como docente